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domingo, 27 de diciembre de 2009


Hoy,27 de Diciembre,siento que mis ganas de amar son tan grandes como el hambre que pasa un niño africano.
En este cielo nocturno lleno de contrastes advierto mi fortaleza plagada de debilidad.
Decido fumarme la existencia entre página y página después de numerar mis múltiples sentimientos.

He empezado a compartir(entre otras cosas)un libro más que oportuno:Mujeres que corren con los lobos.
Os invito a vosotras(y también a ellos)a leerlo,a despertar a la "mujer salvaje" que todos llevamos dentro.
Mientras yo desgrano letras y pensamientos,unos duermen y otros están de fiesta.
Hoy,27 de Diciembre,he comprendido el porqué del peso de mis ojos.No es el abuso de lectura,ni el insomnio,ni tan siquiera el fuerte movimiento neuronal de mi enjambre cerebral...hoy mis ojos son el abrigo de unas enquistadas pestañas que dejaron de besar.
Olvidamos,demasiado rápido, que en las cosas simples reside la clave.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Autoretrato según Manuela






La pasión da sentido a la arquitectura de mis emociones.
Hay quien nace pura sangre y hay quien nace puro nervio.
Hay quien piensa que lo breve puede ser intenso.
Yo pienso:"lo breve si breve,breve es".
Pocas cosas me hacen sentir tan viva como el arte,la naturaleza y el sexo con amor o el amor con sexo.

Tengo dos canas nuevas y una arruga ubicada en mi mejilla izquierda que con insistencia no deja de saludar.Un tiempo cronológico posado sobre mis hombros y el hermano pequeño de éste acariciando mi interior.

He descubierto que duermo con la boca cerrada por miedo a que ciertas ideas se me escapen entre los dientes y se refugien,traviesas,allá donde no deben.

Ab imo pectore,la vida puede cambiarte en un minuto.

domingo, 6 de diciembre de 2009



Ser conscientes del poder de las palabra es importante pero lo es más aún el uso que hagamos de él.Quizás sería más exacto hablar del poder del lenguaje pero hoy prefiero hablar del dominio de los términos.
El mismo Platón en La República se percata de dicho potencial cuando decide expulsar a los poetas de la "ciudad ideal",fascinado y temeroso de la fuerza que ejerce el lenguaje poético en la gente.
A mi parecer es necesario despojarse de tal miedo platónico.Pero también es necesario ser responsable del impacto que pueden provocar nuestras palabras.Cuando lo hacemos dejamos de mirar sólo nuestro ombligo y nos damos cuenta de que también existe "el otro".

Algunos vocablos me gustan en exceso,me hacen sentir ese minuto de placer más allá de lo lingüístico.Su significado y la sonoridad de su significante son capaces de hacerme degustar la sinestesia más deliciosa.
De ésta a la emoción...sólo hay un paso.
Pero no olvidemos que aún en silencio,somos capaces de decir.

Boas noites.