Fluyo,me descontrolo,
acepto el cambio,juego
y me desapego.
Una sola frase
puede atravesarte,
instalándose
más allá de los sueños.
Olvido nombres,
pero no
reacciones dérmicas.
Me reconozco
en algunas miradas
sin habitar en ninguna.
Te acaricio el pelo.
Aprendo que el amor
no entiende de
corazones de asfalto
revestidos de
palabras envenenadas.
Aprendo que el
auténtico amor
camina descalzo
mientras se bebe
las gotas de sudor
de los corazones
que cometen
crímenes de seda.